miércoles, 2 de junio de 2010

El primer discurso de Hitler



El primer discurso que dió Hitler a los alemanes, fue después de conseguir el poder, exactamente el 30 de enero de 1933. En él, expresa que los culpables de la situación de Alemania, son los hombres de la Primera Guerra Mundial (1914-1918) y que su partido junto con él, va a ayudar a mejorar Alemania, y como dice textualmente "salvar a la nación y a la patria".

En el discurso, se puede notar ese sentimiento de humillación tras la Primera Guerra Mundial (recordemos que  se firmó el Tratado de Versalles en 1919, tras el final de la Primera Guerra Mundial, que impuso condiciones a Alemania como que tenía que ingresar gran parte de sus ingresos para pagar los daños a Francia y Gran Bretaña, lo que crearía la imposibilidad de Alemania por recuperarse económicamente).

Hitler explicó que ellos no eran responsables ni de las causas de la Primera Guerra Mundial, ni del estallido de ésta ni de la conducción de la guerra ni tampoco de la situación política que sufría Alemania. Expresó que los hombres de la Primera Guerra Mundial, son los responsables del declive de la política extranjera, la decadencia de la política, de la disolución de las grandes organizaciones nacionales alemanas y de la decadencia y corrupción de la administración de Alemania.

En el video, aparecen símbolos nazis, como la bandera, que se sitúa atrás del Führer, con la cruz gamada (la cruz gamada también esta presente en el uniforme de Hitler), el saludo nazi que hacen los espectadores desde sus asientos hacia Hitler levantando el brazo... Importante, además de la simbología nazi, es la manera de dar el discurso. Hitler muestra en todos los discursos que hizo, que era buen orador, primero decía a los oyentes lo que querían escuchar y lo que quería remarcar, lo decía con mucho énfasis, como para que "quedase claro y lo entendieran". Este discurso y todos los que hizo, creaban en sus oyentes un fácil convencimiento, ya que Hitler se presentaba como "El Salvador de una Alemania en decadencia" y también, como ya he dicho anteriormente, porque era un buen orador.

Cada vez que veo cualquier discurso de este dictador fascista, me asombro porque, ¿Cómo puede llegar alguien al poder y presentarse como "El Hombre que los va a salvar" y que todos le crean? Aquí se demuestra la desesperación de los alemanes por recuperarse de esa crisis que vino tras la pérdida de la Primera Guerra Mundial, de esa humillación... y esa desesperación y ese sentimiento de humillación, los usó Hitler para convencerles de que él y su partido salvarían a la Alemania en decadencia.

Para concluir, cuando vivimos bien, no nos importa el pan de cada día, el trabajo... , pero cuando vivimos mal, nos damos cuenta de la falta de pan, de trabajo... y es en ese momento cuando nos sentimos débiles y nos convertimos en objetos y marionetas de hombres que se hacen llamar "Salvadores de nuestra patria". Tenemos que dar más importancia al pan de cada día, al trabajo, a la vida que tenemos hoy en día, ya que, quizás mañana no la tengamos...

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